Música para las lecturas

Existen varias posibilidades. Se puede tocar una breve obra entre las lecturas o al finalizar estas. En caso de que haya salmo se tocará después de este. Ustedes pueden decidir lo que deseen y en caso de que no estén seguros, no se preocupen. Nosotros nos encargamos de hablar con el acerdote para decidir exactamente el lugar más conveniente para  tocar.